Cuando descansa el mercado
Descansan las casetas, los toldos, incluso aquel guardián de media noche, que tan alegres hacia los regresos a casa por la zona de Abastos. La piedra fría, el olor a matanza, restos de legumbres, cítricos, el verde de puerro, que nadie usa, manjar del cerdo en el rural. Contenedores llenos de ventas, sacos llenos de disfrutes. Cuando descansa el mercado, pensamos en cómo despertarlo al día siguiente. Lo adornaremos con flores, naranjas, miel...Es temporada de caldo, cocido, carnaval, alegría...¡¡Festa Rachada!!!. Colgarán orellas, cacheiras, chourizos, las paisanas con los grelos, "Leva neniño!!!". Yo por mí llevaba todo, a descansar conmigo, a pensar toda la noche en qué hacer contigo: Un prensado, un aire, un esférico, un gnoqui, una nube, un caramelo. Cuando descansa el mercado...este cuento se ha acabado.
Comentarios
Sorte irmán nesta nova andadura!!
muas andi